Los dioses adoran jugar con nosotros, los meros mortales. Y, cada cien años, se lo permitimosNunca he gozado del favor de los dioses. Más bien todo lo contrario, gracias a Zeus.Estoy maldita y trato de pasar desapercibida en la Orden de los Ladrones, con la esperanza de que los caprichosos seres que gobiernan desde el Olimpo no reparen en mí. Algo que no es fácil, porque Zeus es el patrón de mi ciudad, San Francisco. Pero, de algún modo, sobrevivo. Hasta que, una noche, me cruzo con un dios distinto.
Q329.00
Disponible.
Garantía:
24 Horas.
Pago en efectivo disponible
100% de Compra Protegida. Productos originales
| Pagos seguros